El objetivo de la ordenanza sería reivindicar los pueblos originarios en detrimento del conquistador Colón. En este sentido, Castillo manifestó: “Tenemos una historia ignorada, por una conquista sangrienta, y que se conoce tan poco sobre lo que se hizo con nuestros habitantes autóctonos. Fue una limpieza étnica feroz, entonces nos parecía muy importante, ya que contamos con un museo como el Almeida, cambiarle el nombre”.
En este sentido, advirtió: “Hay que ver desde diferentes ópticas, primero reconocer personalidades que marcan y han marcado una impronta en diferentes aéreas, como el profesor Almeida. Una persona que a pesar de ser autodidacta en su materia, logro que en una rama ignorada como la antropología, y la investigación de nuestros ancestro, hoy tengamos un museo antropológico Manuel Almeida, que es de referencia por la calidad de piezas que tienen”.
El cambio de nombre supone no solo un reconocimiento, sino sentar una transformación desde el punto de vista simbólicas. “También trae emparejado que se pueda aprovechar desde el turismo histórico para ponerla en valor nuestra historia local, y que además se pueda conocer la figura de Almeida”.
