La injerencia de los Estados Unidos en el conflicto ambiental por la pastera de Fray Bentos.
Prefacio
Para un periodista, el objeto de toda investigación es la búsqueda y difusión de información oculta, reservada o secreta, de hechos y eventos que otros quieren impedir que sean conocidos en un ámbito social mayor que aquel circuito al que pertenecen los que están enterados. En la profesión periodística se ha instaurado, como dogma de fe, la tentación de restringirse a la denuncia estrecha en lugar de procurar una visión más amplia de los hechos, que requiere situarlos en su contexto.
He preferido poner en tela de juicio el propio sistema, desenmascararlo y aportar, dentro de las posibilidades, coherencia a las indagaciones. Porque si bien es muy cierto que el ejercicio del derecho a la información es de todos los ciudadanos, el uso privilegiado que los periodistas hacemos de ese derecho, también soporta el plus de la documentación y la verificación de los acontecimientos. Siempre podrá haber una aproximación a lo que consideramos como verdad de los hechos, pero ésta nunca será absoluta. Ese acercamiento será siempre directamente proporcional a la cantidad y calidad de las fuentes a las que se tenga ocasión de acceder, a las interpretaciones e hipótesis que construyamos y a los análisis que realicemos.
Harán bien los lectores en ser prudentes, pues no necesariamente es la verdad lo que sucede a la mentira: ésta puede perpetuarse, de sorpresa en sorpresa. Y guárdese el juicio hasta el final, pues es más posible que, al amparo de tanta mentira, sean causas nobles las que sobrevivan, tales como la libertad o la Justicia.
Lo que leerán a continuación no es ficción ni realismo mágico, aunque a veces pueda parecerlo. No obstante, no sería extraño que algunas personas intenten convencerlos de que todo lo que se relatará seguidamente, jamás sucedió.
Enero de 2006
Era jueves, a las seis y treinta y un minutos de la tarde. James Dinneen Nealon Jr. escribió “End Comment” y puso el punto definitivo al documento de cinco puntos que acababa de redactar y al que tituló de forma enigmática: “Los comentarios de FTA encienden debates internos / externos”.
Aquel 12 de enero de 2006, casi mecánicamente, aquel sujeto nacido en Virginia, enderezó los espejuelos cuadriformes a su rostro y estampó el consabido sello de “Confidential” y clasificó el telegrama con la leyenda “restricciones de manejo 6586”. Ese cifrado significaba que podrían acceder a su contenido tan solo cuatro personas: los responsables de Inversiones Extranjeras (EINV) y de Comercio Exterior (ETRD) del Departamento de Comercio y los encargados de las oficinas de Asuntos Políticos (PGOV) y de Relaciones Políticas Externas (PREL) del Departamento de Estado.
Después de haberse graduado como profesor de Historia en las Universidades Brown y Boston College, Nealon se incorporó al Servicio Exterior de los Estados Unidos en 1984 y, antes de llegar a Montevideo, ya había sido Consejero en las Embajadas norteamericanas en Canadá y Perú. Y si bien, en aquel verano de 2006 se había hecho cargo de la representación diplomática en espera de la designación de un nuevo Embajador, ya sabía que su permanencia en Uruguay estaba por concluir. Lo que en ese momento no pudo imaginar, es que diez años más tarde terminaría transformándose en Subsecretario del Departamento de Seguridad Nacional de los Estados Unidos. Pero para ese momento, aún faltaba gastar mucho almanaque.
El azul meridiano del cielo montevideano de aquella tarde de enero, contrastaba con el gris insípido del edificio de ventanas cuadradas de Lauro Muller 1776. Eran exactamente las seis y treinta y ocho minutos, cuando James Nealon, Encargado de Negocios de la Embajada de los Estados Unidos en Uruguay, accionó “send” y aquellas cuatro páginas comenzaron a transitar un encriptado sendero hacia Washington.
“La defensa abierta del Ministro de Economía Astori de un Tratado de Libre Comercio (TLC) con los EE.UU. (ref. A) la semana pasada ha provocado fuertes reacciones en el país y en el extranjero porque un gobierno "izquierdista" del Mercosur ha dicho públicamente que quiere hablar con nosotros sobre el libre comercio”. Así comenzó Nealon su relato. Y más allá de la referencia al entonces ministro de Economía uruguayo Danilo Ángel Astori Saragosa, seguidamente dio en el clavo de lo que, a partir de ese momento y hasta 2010, sería una de las principales razones por las cuales Estados Unidos se iba a involucrar en el ya avanzado conflicto por la instalación de la pastera de Botnia en Fray Bentos. La pluma de Nealon deslizó: “Si bien estamos convencidos de que el presidente Vázquez respalda a Astori por convicción, el dramático juicio ensayado sobre el TLC probablemente fue provocado por las relaciones agrias con Argentina por la construcción de plantas de celulosa en un río compartido (ref. B) y la frustración con la forma en que Mercosur trata a sus socios menores”.
James Nealon, Encargado de Negocios de la Embajada de EE.UU en Uruguay
Lo que aparece consignado en el Cable Confidencial 038 de aquel 12 de enero de 2006, anticipaba lo que en Argentina aun ni siquiera nadie imaginaba: “El Ministro de Agricultura Mujica contribuyó al coro de opiniones al decir en una entrevista que, ‘el Mercosur no vale un carajo’ por ‘la guerra no declarada’ lanzada por Argentina por la construcción de la fábrica de papel en Fray Bentos. Mujica también recordó a los oyentes que la corrida bancaria de 2002 (‘corralito’) que comenzó en Buenos Aires, arrastró a Uruguay a su peor crisis financiera de los últimos años”.
José Mujica Cordano caía bajo los focos del escrutinio por muchos motivos. Estaban las imágenes de su modestísima chacra de menos de 50 metros cuadrados con tejavana de chapa donde reside junto a su esposa Lucía Topolansky sin escoltas ni asistentes, sus tractores y sus plantaciones de crisantemos y hortalizas y por conducir un escarabajo Volkswagen celeste, un Fusca de 1987.
Y también estaban sus frases. Algunas, venían envueltas en papel celofán para regalo. Su belicismo plástico para referirse al conflicto de Botnia, que condensaba como una 'guerra no declarada' o las locuciones de niño malcriado como 'esa vieja es peor que el tuerto, el tuerto era más político, ésta es más terca', para perfilar al matrimonio de Néstor y Cristina Kirchner, por ejemplo, eran capaces de suscitar auténticas epifanías en sujetos simplones como Nealon.
Los párrafos siguientes suscriptos por Nealon justificaban el motivo por el cual aquel documento tenía carácter restringido: “(…) una reunión del 29 de diciembre (léase de 2005) en la que el presidente Vázquez le dijo al ex presidente (Blanco) Luis Alberto Lacalle que estaba ‘decepcionado’ con Néstor Kirchner por el asunto de la planta de celulosa”. La desazón de Tabaré Vázquez para con su par argentino sería vox populi recién un año después. Es decir que Estados Unidos no solo tenía información sensible de lo que ocurría en el seno del Gobierno uruguayo en relación al tema de la pastera, sino que también comenzaba a delinear cuál iba a ser la forma en la que actuaría: públicamente aparecería tomando distancia del conflicto, pero solapadamente accionaría en contra de Argentina: “Desde nuestro punto de vista, -concluía Nealon- la excusa del TLC representa otra oportunidad para que el Gobierno de los Estados Unidos involucre a Uruguay a un alto nivel. Esperamos que el 2006 sea un año crítico para Vázquez en el que necesita mostrar resultados económicos. Mientras una Bolivia liderada por Evo Morales se prepara para unirse al Mercosur como miembro de pleno derecho, probablemente también sea de nuestro interés echar una mano al GOU (léase Gobierno Uruguay) que está luchando por emular a un Chile moderado en lugar de una Venezuela bolivariana”. (1)
Estaba todo dicho.
El confesionario
Ocho meses antes que el Encargado de Negocios Nealon enviara su cable a Washington, exactamente el 30 de abril de 2005, el Puente Internacional General San Martín que une Gualeguaychú y Fray Bentos había sido escenario de un magistral repudio ante el inicio de las obras de construcción de la pastera de Botnia, que oficialmente había comenzado 15 días antes. Las 40 mil personas que marcharon pacíficamente protestando aquel día, significaron para el gobierno de Néstor Kirchner la primera señal de que lo que estaba sucediendo no era un conflicto más. En Olivos se encendieron las máximas alarmas.
A principios de junio de aquel 2005 quedó constituido el Grupo Técnico Bilateral de Alto Nivel (GTAN) para estudiar, en un plazo de 180 días, las posibilidades de paralizar las obras en Fray Bentos y relocalizar la fábrica de celulosa. Sin embargo, a los pocos días, cuando se supo que el informe que se produjera sería no vinculante, el GTAN firmó su propio certificado de defunción.
En julio, tras dos cortes en la Ruta Internacional 136, el entonces canciller argentino Rafael Bielsa llega por segunda vez a Gualeguaychú para intentar convencer a los responsables de la protesta que desistieran de bloquear la ruta. No lo lograría. El 7 de octubre, la Gendarmería se vio obligada a desalojar una antigua maquina agrícola que había sido atravesada en la ruta internacional. Entre el 20 y el 23 de diciembre hubo nuevos bloqueos en la 136.
Tanto las respectivas autoridades nacionales con sede en Buenos Aires como en Montevideo pero muy particularmente las Embajadas norteamericanas en ambas ciudades, comprendieron que el horno no estaba para bollos.
Desde septiembre de 2003, Lino Gutiérrez ocupaba la titularidad de la Embajada de EE.UU en Argentina. Antes de recalar en el Río de la Plata, éste cubano nacido en La Habana había ocupado similar cargo en Nicaragua (1996-1999), luego recaló en la Subsecretaría para Asuntos del Hemisferio Occidental del Departamento de Estado y, en 2002 se desempeñó como Asesor de Asuntos Internacionales en la Escuela Nacional de Guerra. Eran las épocas en las que reinaban, George Walker Bush y el general de cuatro estrellas Collin Luther Powell.
En el verano de 2006, en un lapso de 13 días, el entonces Embajador Gutiérrez escribió dos cables secretos desde Buenos Aires que reflejaban el cuadro de situación imperante entre nuestro país y Uruguay a causa de Botnia. Además de hacer una descripción de los acontecimientos, dejó reflejado que en el seno del Gobierno de Néstor Kirchner no todos opinaban igual en relación a la instalación de la pastera. En realidad, los miembros del gabinete presidencial que se oponían a los reclamos de Gualeguaychú siempre fueron bastantes más de los que siempre se supuso que lo eran.
Otra cosa muy diferente era que, muchos de esos funcionarios, lo transparentaran con luz y taquígrafos, siguiendo aquel mandamiento del profeta Felipe Solá, quien mientras fumaba un habano Cohiba donado por Fidel Castro, dictaminó que el mejor secreto para mantenerse siempre en el poder era "hacerse el boludo".
Hasta ese momento, existía la impresión de que el movimiento ambientalista y el gobierno de Kirchner parecían interactuar en cierta sinto ía. No era tan así. Gutiérrez lo supo porque tenía un confidente de alto nivel en la Cancillería, que le adelantaba todos y cada uno de los pasos de la estrategia argentina frente a Uruguay.
El 17 de febrero de 2006, el cubano reportó a Washington sobre posibles cambios en el entonces gabinete del Presidente Kirchner que jamás se producirían y luego se detuvo en el tema Botnia. “Las tensiones entre Argentina y Uruguay siguen siendo altas, ya que los argentinos que residen frente a la ubicación propuesta de dos fábricas de papel uruguayas continúan bloqueando carreteras de alto perfil en dos de los tres puentes que conectan Uruguay con la provincia argentina de Entre Ríos. (…) los manifestantes lanzaron recientemente un control de carretera las 24 horas del día en el puente más utilizado que conecta la ciudad argentina de Gualeguaychu y la ciudad uruguaya de Fray Bentos. Un grupo de ciudadanos de Gualeguaychu votó a favor de continuar la barricada 13 días seguidos. (…) El 16 de febrero, un grupo de ciudadanos de la ciudad argentina de Colón anunció que se unirían a la protesta y comenzó un control de carreteras las 24 horas del día en el segundo puente más utilizado entre los países”.
Este solo era un pequeño entremés.
Néstor Kirchner y el Embajador Lino Gutiérrez
A continuación, el lector apreciará el tenor de la información de anticipación que brindaba la persona que se confesaba con el virrey: “El GOA (léase Gobierno de Argentina) originalmente apoyó el derecho de los manifestantes a bloquear los puentes, pero recientemente ha decidido su intención amenazadora de llevar al GOU a la Corte Internacional para evitar la construcción de las plantas. El GOA ha instado a los manifestantes a detener las formas de protesta que podrían dañar el caso argentino ante la Corte Internacional, pero hasta la fecha no ha mostrado voluntad de intervenir y abrir los puentes. La postura del Gobierno de Argentina hacia los manifestantes está en línea con las políticas de no confrontación que el presidente Kirchner ha adoptado hacia la mayoría de las formas de protesta social desde que asumió el cargo en 2004. No hay indicios de que Kirchner detenga las protestas o tome alguna acción más amenazando con remitir el asunto a la Corte Internacional. (…) El vicecanciller García Moritán opinó ante el Embajador que el Gobierno de Argentina no veía una solución a corto plazo al problema y que las relaciones empeorarían antes de mejorar…”. (2)
Queda más claro que el agua mineral sin gas que los norteamericanos conocieron con bastante antelación que Argentina llevaría el caso de las pasteras ante la Corte internacional de Justicia de La Haya. Lo supieron en febrero de 2006, tres meses antes de que se produjera. ¿Cómo se enteró el Embajador Gutiérrez? Parte de la respuesta puede leerse en el cable confidencial 486, que despachó a Washington a las 21 horas del 1° de marzo de aquel 2006.
“Durante su discurso anual ante el Congreso el 1 de marzo (SEPTEL), el presidente Néstor Kirchner hizo sus primeras declaraciones públicas sobre las polémicas papeleras en construcción en Uruguay (REFTELS). En sus declaraciones, Kirchner apeló directamente al presidente uruguayo, Tabaré Vásquez (sic), a ‘detener la construcción de la papelera por sólo 90 días mientras los mejores ambientalistas del mundo estudian el proyecto’ y ‘buscar una solución inmediata al problema’. Kirchner hasta ahora había dejado en manos de otros, como el canciller Taiana, la presión sobre el caso argentino. Sin embargo, en una medida de la seriedad con la que el Gobierno de Argentina se está tomando esta disputa, un diplomático de la UE [proteger] le dijo al Embajador el 1 de marzo que el vicecanciller García Moritán le había dicho al Embajador de Finlandia en Argentina (quien también está acreditado en Uruguay) que el Gobierno de Argentina estaba dispuesto a romper relaciones diplomáticas con Finlandia si continuaba la construcción de las plantas. FIN COMENTARIO”.
La mención a Roberto García Moritán, no es inocente. Se trata de un diplomático de carrera que terminó eyectado en medio de un escándalo de presunta corrupción que provocaría ríos de tinta y mares de sospechas de sobornos por el dragado del Canal Martín García.
Su trayecto comenzó siendo sombrío. El 1° de abril de 1982, cuando tenía rango de Secretario de Embajada, García Moritán fue convocado por el entonces canciller Nicanor Costa Méndez para que oficiara de traductor durante la famosa comunicación telefónica entre Leopoldo Galtieri y Ronald Reagan. Entre 1992 y 1998 se dedicó a la sensible cuestión sobre la no proliferación de armas químicas, llegando a formar parte del grupo de expertos que inspeccionó en Irak el material nuclear, químico y biológico del gobierno de Sadam Husein. Durante 2000 y 2001, García Moritán fue director de Política Latinoamericana del gobierno de Fernando De la Rúa y en 2004, Rafael Bielsa lo nombró Subsecretario de Política Exterior. Un año más tarde se convertiría en Vicecanciller del entonces ministro de Relaciones Exteriores, Jorge Taiana. Pero no le fue bien: en 2008 la entonces Presidenta Cristina Fernández lo apartó con cajas destempladas.
Recalaría en la Comisión Administradora del Río de la Plata (CARP), donde su final fue aciago, al verse involucrado en el escándalo “Boskalis-Riovía”, que versaba sobre presuntos sobornos que habrían acaecido en torno a las obras del dragado del Canal Martín García, un caso que fue investigado por el decente e íntegro Fiscal Federal Federico Delgado.(3)
Al día siguiente de que el Embajador Gutiérrez enviara su cable desde Buenos Aires, el Encargado de Negocios Nealon, despachó con premura desde Montevideo: “El GOU ha rechazado rotundamente la oferta pública del 1 de marzo del presidente Kirchner (ref A) para buscar una solución a la disputa de la fábrica de papel deteniendo la construcción durante 90 días mientras los ambientalistas realizan un estudio. El vicepresidente Nin Novoa no ayudó en nada al calificar el pedido de Kirchner de ‘súplica impertinente’". (4)
Washington ya contaba con suficiente madera para encender el fuego. Y no perdería mucho tiempo.
El álgebra
Aquel ajetreado verano de 2006 sería el prólogo de un otoño no menos zarandeado. En abril, los asambleístas de nuestra ciudad se plantaron frente a la Embajada de Finlandia en Buenos Aires para llevar su protesta ante los representantes del Estado accionista de Botnia, lo que provocaría que la Ministra de Comercio Exterior finesa, Paula Lehtomäki, aterrada, anulara ipso facto su planeada visita a Buenos Aires.
Lehtomäki estaba en plena gira por Uruguay, que se extendería a Chile, Perú y nuestro país. En Montevideo discutió temas de comercio e inversión, incluidos los relacionados con la planta de celulosa en construcción de Botnia en Fray Bentos, donde un puente permanecía bloqueado. Durante su visita del 25 al 26 de abril, la Ministra Lehtomäki prestó su apoyo en forma privada y pública al proyecto de una planta de celulosa, diciendo que la planta utilizaba tecnología ambientalmente segura que ha sido probada segura por 19 de esas plantas que operan en Finlandia y en otros lugares y han sido respaldados por exhaustivos estudios científicos. Cuando le advirtieron del humor vítreo que había al otro lado del río, Lehtomäki canceló su viaje a Buenos Aires, afirmando públicamente que "no era una invitada bienvenida" en Argentina.
Mientras tanto, Néstor Kirchner y Tabaré Vázquez acordaban realizar dos encuentros para negociar una salida a la controversia en un plazo de noventa días. Durante ese lapso de tiempo, Botnia y la española ENCE, que pretendía instalarse con otra pastera en la zona de M’Bopicuá, deberían suspender las obras en marcha, a cambio cesar con el corte en la Ruta Internacional 136. Sin embargo, Botnia anuncia que solo suspendería sus obras por diez días en vez de noventa. El acuerdo fracasa, la Cancillería uruguaya da por terminadas las negociaciones directas con Argentina y hasta 2007 ambos mandatarios no volverían a verse las caras.
El patio se ponía denso. Mientras el gobierno del Frente Amplio promovía una ley en el Parlamento uruguayo para expulsar a extranjeros ante situaciones de ingresos irregulares, la Corporación Financiera Internacional (CFI), un organismo del Banco Mundial, daba a conocer un documento con las conclusiones del científico canadiense Wayne Dwernychuk donde indicaba que pese a los problemas o imprecisiones de los proyectos de las pasteras, los comentarios que expresan la preocupación de que las plantas causen daños ambientales catastróficos carecen de sustento, son irracionales, e ignoran la experiencia de muchas otras modernas plantas similares.
En el atardecer del miércoles 26 de abril, el profesor Nealon se sentó frente a su computadora y comenzó a redactar el cuerpo del Cable 376, que desde Montevideo partiría cinco minutos antes de las ocho de la noche hacia destinos múltiples: una copia al Consejo de Seguridad Nacional, otra para el Secretario de Estado, una tercera para el Jefe del Comando Sur y de la IV Flota de los Estados Unidos y, también, para que se enteraran en la Embajada norteamericana en Helsinki.
En su escrito, Nealon comenzó a dejar pistas para la historia. “En Uruguay ha habido un descontento generalizado por los informes de Sao Paulo de que Brasil y Argentina no apoyarán la sumisión de la disputa de la papelera al mecanismo de resolución de conflictos del Mercosur, ya que los presidentes Lula da Silva y Néstor Kirchner aparentemente consideran que el asunto es puramente bilateral. Los informes también sostuvieron que el presidente argentino Kirchner solicitó otro estudio de impacto ambiental en las plantas. La noticia se produjo en vísperas de la partida del presidente Vázquez el 25 de abril para una visita oficial de nueve días a México y Estados Unidos”. (4)
Sin embargo, a Vázquez le siguieron los pasos durante ese periplo de fines de abril de 2006. El médico oncólogo emprendió la gira buscando apoyo por el diferendo de Botnia que lo había enemistado con Argentina y, para sorpresa de los norteamericanos recaló dos días en Caracas. Según registraría después Nealon con alivio, lo de Vázquez en Venezuela “no fueron más que tratados de negocios”. En esa instancia, Vázquez firmó 11 acuerdos comerciales y científicos con Hugo Chávez, confirmó su participación en la cadena venezolana de noticias Telesur, y se comprometió con su homólogo a fortalecer instrumentos para la integración regional, como Petrosur y Petroamérica. (5)
¿A qué clase de informes se refería Nealon? ¿Quién o quiénes lo estaban previniendo desde San Pablo?
Los autores de tales confidencias parecían tener muy buena información y Nealon, después de confirmar su veracidad con fuentes del Gobierno uruguayo, la retransmitió de esta forma a sus superiores en Washington: “Los miembros del séquito del presidente Vázquez nos han dicho que él puede plantear la disputa de la papelera en su reunión del 4 de mayo con POTUS sin expectativas de que Estados Unidos tome partido en el asunto. Sin embargo, también entendemos que Uruguay está considerando seriamente presentar una denuncia formal ante la OEA. Aparentemente, algunos funcionarios también esperan contar con la ayuda de Finlandia cuando asuma la presidencia pro-tempore de la UE en julio próximo, si la disputa de la fábrica de papel no se resuelve para entonces”.
Una aclaración para el lector: el acrónimo “POTUS”, en la jerga confidencial norteamericana, significa President of United States. Lo que no quiere decir que George Bush fuera una planta ornamental. (6)
Estados Unidos está convencido que el resto del mundo cree que son los únicos que ganan las guerras y que gracias a ello, las corporaciones gobiernan en el planeta. Piensan que su país es el mundo y viceversa. La traducción práctica de este entretenimiento estratégico y geopolítico simboliza, en el asunto específico de las pasteras, que mientras los intereses de Tabaré Vázquez se extendían dentro de su territorio, los de Botnia eran –y siguen siendo- globales.
La historia cuenta que los árabes fueron quienes inventaron el álgebra en el siglo IX, pero los norteamericanos descubrieron como usarlo.
En los siguientes capítulos de esta historia, veremos cómo lo hicieron.
MARIO BERMUDEZ
NOTAS
(1) Embajada de EE.UU. “FTA Comments ignite Internal/External Debates”. Cable confidencial 038 del Encargado de Negocios James D. Nealon. Montevideo, 12-1-2006. Copia en el archivo del autor.
(2) Embajada de EE.UU. “Kirchner breaks silence on Paper Mill controversy”. Cable confidencial 486 del Embajador Lino Gutiérrez. Buenos Aires, 1-3-2006. Copia en el archivo del autor.
(3) Sobre la investigación acerca de presuntos sobornos en el dragado del Canal Martín García en la que se vio involucrado Roberto García Moritan: Diputados nacionales Graciela Ocaña y Manuel Garrido, denuncia sobre presunto soborno obra dragado Canal Martín García http://www.correodelosviernes.com.uy/Texto-de-la-denuncia-sobre-el-soborno-en-Martin-Garcia.asp “Gobierno dice no tener pruebas de coimas, pero Riovía fue beneficiada”. El Observador, Montevideo, 8-5-2012 http://www.elobservador.com.uy/noticia/223624/gobierno-dice-no-tener-pruebas-de-coimas-pero-riovia-fuebeneficiada/ “Polémica por una obra con Uruguay. La Nación, 13-5-2012. http://www.lanacion.com.ar/1472833-polemica-poruna-obra-con-uruguay “Uruguay: admiten intentos de coima”, por Nelson Fernández, corresponsal. La Nación 17-5-2012 https://www.lanacion.com.ar/politica/uruguay-admiten-intentos-de-coima-nid1473888/ “Dimite colaborador Mujica tras admitir sobornos comisión uruguayo-argentina”. La Información. Montevideo, 17-5-2012 https://www.lainformacion.com/espana/dimite-colaborador-mujica-tras-admitir-sobornos-comision-uruguayo-argentina_q5Z7To6i67RMLeZjtfMZm4/ “Imputaron en la causa a un diplomático argentino y a un ejecutivo”, por Paz Rodríguez Niell. La Nación, 24-6-2012 https://www.lanacion.com.ar/politica/avanza-la-investigacion-por-un-supuesto-soborno-nid1484714/ “Argentina descartó a la firma sospechada”. Página/12, Buenos Aires, 28-7-2012 https://www.pagina12.com.ar/diario/elpais/1-199762-2012-07-28.html “Uruguay: escándalo del dragado va a la Justicia”. Diario Río Negro /DyN. Buenos Aires, 5-8-2012 https://www.rionegro.com.ar/uruguay-escandalo-del-dragado-va-a-la-justici-FCRN_934100/ “Uruguay presentó una denuncia sobre las supuestas coimas por el dragado del canal Martín García”. iProfesional, Montevideo 10-8-2012 https://www.iprofesional.com/comex/142377-uruguay-presento-una-denuncia-sobre-las-supuestas-coimas-por-el-dragado-del-canal-martin-garcia “Nueva respuesta contra la Argentina. Uruguay presentó una denuncia por el canal Martín García” por Nelson Fernández, corresponsal. La Nación 10-8-2012 https://www.lanacion.com.ar/politica/uruguay-presento-una-denuncia-por-el-canal-martin-garcia-nid1497984/
(4) Embajada de Estados Unidos. “Paper Mill dispute has Finland’s attention”. Cable confidencial 376 del Encargado de Negocios James D. Nealon. Montevideo, 26-4-2006. Copia en el archivo del autor.
(5) “La traición fuera de la frontera”. CX36 Radio Centenario. Montevideo, 14-3-2011 http://www.radio36.com.uy/mensaje/2011/03/m_140311.html
(6) Glosario de abreviaturas militares y diplomáticas. Diario el País. Madrid, 28-11-2010. Acronymfinder http://www.acronymfinder.com Abreviaturas Administrativas del Depto. de Estado http://dosfan.lib.uic.edu/ERC/about/abbreviations.html Diccionario y listado de acrónimos del Depto. de Defensa de EE.UU http://www.dtic.mil/doctrine/dod_dictionary Directorio del Depto. de Estado http://www.state.gov/documents/organization/126137.pdf
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