Velázquez dijo sobre la aparición de “chinches de agua o cucarachas de agua”, que estos insectos “proliferan con la lluvia y el calor, si pican no es peligroso para el humano, se ocultan en lugares con agua durante el día y salen durante la noche para tener su actividad”.
Algunos ejemplares de esta especie llegan a medir hasta 15 centímetros. El profesional explicó que la presencia en masividad en la ciudad, de los últimos días, podría estar relacionada a las altas temperaturas. “Son atraídos por las luces y salen a cazar otros insectos en las noches de mucho calor”, indicó.
“Es una buena señal, el ecosistema está funcionando bien. Son muy necesarios porque generan equilibrio en el ecosistema en el agua y consumen larvas de mosquitos Aedes”, subrayó Velázquez.