Por robo de cables se quedó sin internet y Flow una zona de la ciudad

El hecho se produjo en 1ro de Mayo y Rodó y perjudicó a toda ese sector.

Los técnicos trabajaron desde las 7 de la mañana para reparar el daño y restablecer el servicio.

En los últimos tiempos, se ha observado un preocupante incremento en el robo de cable, una práctica que no solo afecta económicamente a diversas empresas, sino que también causa severos trastornos a los usuarios de internet y televisión por cable. Este fenómeno, impulsado por la creciente demanda y valor del cobre en el mercado, ha llevado a delincuentes a cortar cables sin discriminar entre los conductores de cobre y la fibra óptica, causando daños masivos a la infraestructura de telecomunicaciones.

El cobre, debido a sus excelentes propiedades conductivas y su valor económico, ha sido durante mucho tiempo el objetivo de los delincuentes.

Los ladrones, en su afán por encontrar cobre, han comenzado a cortar indiscriminadamente cables de fibra óptica, que están hechos de vidrio y no contienen metal. Esta práctica no solo es infructuosa para sus ambiciones, sino que también provoca interrupciones en servicios esenciales de internet y televisión por cable que dependen de esta tecnología avanzada.

El impacto sobre los usuarios es considerable. La fibra óptica es la columna vertebral de la infraestructura moderna de telecomunicaciones, permitiendo conexiones de alta velocidad y gran capacidad. Cuando los cables de fibra óptica son cortados, se producen apagones en los servicios de internet y televisión que afectan a personas, empresas y entidades. Estos apagones pueden durar horas, días, o incluso semanas, dependiendo de la rapidez con la que los operadores puedan reparar el daño.