COLUMNA

24 de Abril de 2022

El mito de los 70 años peronistas II: dieciocho años de proscripción y fusilamiento

Columna de opinión por José Luis Pereyra, escritor, docente y ganador del Premio Fray Mocho.

Redes Sociales

 

   “Ustedes, los peronistas, son lo peor que le pudo pasar a la Argentina.” “En 70 años, fundieron el país.” Ante esta frase y fiel a mi costumbre de refutar errores,  intenté explicar que el justicialismo fue proscripto por 18 años y que también hubo otros golpes militares, que más tarde gobernó Alfonsín, De La Rúa, Macri…  “¡Cerrá el pico, loco! Todos ustedes son ‘la Casta’. ¿No te das cuenta?”, me contestan. Tengo el cuero duro. A lo largo de mi vida he aguantado muchas cosas fuleras, pero todo tiene su límite. Por ejemplo, cuando  algún terraplanista me coloca ideológicamente al lado del almirante Rojas o los generales Lonardi, Aramburu, Onganía, Videla y el ingeniero Macri…, entonces me caliento y le pongo punto final a la conversación. 

     La verdad de la milanesa, incrédulos lectores, es que en los últimos setenta años hubo solamente dos tipos de gobierno: I) los peronistas y II) los antiperonistas, es decir el gobierno de los millonarios argentinos (del campo, la industria, el sector financiero) que comulgaron con la doctrina “liberalísima” de “La Embajada” y fueron apoyados por ésta hasta los límites del crimen, la mentira y el atraso. Como los argentinos ricos son pocos y tienen escasa representatividad en las urnas, han recurrido a golpes militares para instalarse en el poder. Esta apetencia de la oligarquía nacional por la dominación, fue coincidente con los negocios de las empresas norteamericanas y también con la necesidad geopolítica de mantener a raya al comunismo durante la guerra fría. Con este objetivo, los militares sudamericanos fueron adoctrinados en la Escuela de las Américas para aplicar el famoso “Plan Cóndor” pergeñado por el Pentágono y la CIA en la década de los ’70 y parte del ’80. Ahora la geopolítica yanqui tiende a mantener alejados a China y Rusia, sus actuales rivales económicos. Así como los lobos y zorros demarcan su coto de caza empleando la orina y sus excrementos, EEUU domina gracias a las armas, los medios de comunicación, la deuda externa y la inestimable ayuda del cipayo de turno.  

     En los últimos setenta años se han producido intrincados eventos sociopolíticos que, quizás por su misma complejidad, rara vez son enseñados en las escuelas: a) Cuatro gobiernos radicales (Frondizzi, Illia, Alfonsín y De La Rúa) que, más allá de las buenas intenciones, no lograron cumplir el período establecido por ley; b) Presidentes de facto (los generales  Lonardi, Onganía, Levingston y Galtieri) que fueron derrocados por ¡golpes de Estado militares!; c) Un presidente “peronista” (Menem) que, durante sus dos mandatos, aplicó medidas absolutamente neoliberales y mantuvo relaciones carnales con EEUU; d) Un millonario (Macri) que basó su campaña electoral esgrimiendo consignas populistas, fue elegido por el pueblo,  cuando llegó a la Casa Rosada bailó ante sus electores y, poco más tarde, les mostró los voraces colmillos de payaso Pennywise.  

     Antes de pasar a los dieciocho años de proscripción, deberé aclarar qué cosas NO hizo  Perón durante sus nueve años de “tiránico” gobierno: no devaluó la moneda, no fusiló ni reprimió huelgas obreras a cañonazos, quizás porque no hubo descontento entre los trabajadores; no contrajo deudas, sino que las saldó;  no mandó gendarmes con bastones largos para que golpearan a estudiantes y docentes universitarios; no negoció con potencias extranjeras la enajenación de empresas públicas ni recursos naturales; nunca fue un cipayo ni un vendepatria, sino un nacionalista a ultranza. Veamos ahora quienes gobernaron entre 1955 y 1973 y cuáles fueron sus grandes hazañas:   

Revolución Libertadora (“la Fusiladora”), (23/09/1955 al 01/05/58): General Eduardo Lonardi (1955): Como buen ultra católico, odiaba más a Perón que al cáncer que terminó consumiéndolo un año después. Solo gobernó 51 días. En Córdoba, mató de un tiro en la cabeza al  jefe de la Escuela de Artillería que no quiso plegarse a la sublevación y atacó con cañones y dos tanques Sherman a una manifestación que repudiaba el golpe militar. Muchos civiles murieron durante tal represión. Lonardi fue destituido por el general Pedro Eugenio Aramburu (1955 a 1958): Junto con su vicepresidente, el almirante Isaac Rojas, Aramburu hizo fusilar “oficialmente” a 16 militares y 13 civiles tras el levantamiento del General Juan José Valle. (Leer Operación masacre, de Rodolfo Walsh). Se ignora la cantidad exacta de ejecutados extraoficialmente. 

Gobierno radical de Arturo Frondizi, (1958 al 1962): Su mandato, cuya orientación política fue llamada “Desarrollismo”, estuvo signado por conflictos gremiales y  presiones del poder militar.  Cometió varios errores: mantuvo una entrevista secreta con el Che Guevara, se “abrió” comercialmente a China y  no concedió “todas” las explotaciones petroleras a empresas norteamericanas. A pesar de contar con el apoyo del presidente Kennedy, la CIA y los agregados militares yanquis promovieron su derrocamiento. Poco antes de terminar su mandato, fue detenido, encarcelado sin juicio previo durante un año y medio, lo cual le impidió postularse para las elecciones de 1963.

Gobierno títere de José María Guido (29/03/1962 al 12/10/63): Si bien Guido fue un civil, llegó al  poder por obra y gracia de otro golpe de Estado orquestado entre “La Embajada” y grupos militares argentinos. Como buen amigo de EEUU, aplicó la receta de siempre: devaluó el peso en un 60%, lo cual elevó el precio del dólar (de $83 a $132), eliminó restricciones para las importaciones, aumentó las tarifas de los servicios públicos y tomó préstamos ante el FMI. ¿Les resultan familiares estas medidas económicas?

Gobierno radical de Arturo Umberto Illia (desde 1963 hasta el 28/06/1966): Llegó al poder gracias a elecciones controladas por las FFAA, las cuales habían proscripto al peronismo, al comunismo y al desarrollismo de Frondizzi. Illia era un médico honesto que dedicó un mayor porcentaje a la educación y al plan de alfabetización, redujo la deuda externa, reivindicó en foros internacionales la causa Malvinas, hizo sancionar las  leyes de Medicamentos y Salario Mínimo, Vital y Móvil. Su derrocamiento se debió a una campaña militar y  mediática (la primera en que intervienen periodistas del que más tarde sería el Grupo Clarín, Mariano Grondona y Bernardo Neustadt). Se instaló en la opinión pública la imagen de una tortuga (Illia) timorata y lenta, contraponiéndola con un militar enérgico y expeditivo: el general Carlos Onganía, a quien se le pedía intervenir en salvaguarda de la Patria. 

Dictadura militar llamada “Revolución Argentina”, (1966 a 1973). General Juan Carlos Onganía, “el Onganiato”, (1966 a 1970): Llegó al poder gracias al apoyo de un grupo ultra católico llamado “Los cursillos de la cristiandad” y de “La Embajada” con la cual Onganía entretejió el PAM (Plan de Ayuda Militar), que contemplaba la compra de armamento a EEUU y el alineamiento de Argentina a los planes bélicos del Imperio. García Lupo denunció la presencia de nuestros militares en Saigón, durante la guerra de Vietnam. También advirtió sobre la maniobra de empresarios yanquis y sus pares argentinos en el desmembramiento de ELMA (la Flota Mercante y la Flota Fluvial del país), YPF y Aerolíneas Argentinas. (Leer Mercenarios & Monopolios en la Argentina de Onganía a Lanusse 1966-1971). Sin embargo la Morsa, como le decían a Onganía por sus grandes bigotes, sería recordado por “la noche de los bastones largos” (hizo dar bastonazos a profesores y alumnos que se opusieron a la reforma universitaria); por “el Cordobazo” (reprimió a cañonazos las huelgas de obreros descontentos por el congelamiento de salarios y la pérdida de poder adquisitivo); devaluó el peso en un 40% y cambió la denominación monetaria; aplicó la estúpida censura (además de prohibir la ópera Bomarzo, el ballet La consagración de la primavera, la película  Blow Up y otras obras artísticas, hizo cerrar el Instituto Di Tella y la revista satírica Tía Vicenta por aparecer en los kioscos con una enorme morsa dibujada en la portada). Durante la gestión de Onganía, la escalada de violencia tuvo su pico más alto con la consolidación de los grupos guerrilleros FAR, ERP, y Montoneros, el secuestro y muerte, por esta última organización, del ex dictador Pedro Eugenio Aramburu, en 1970. El “onganiato” culminó cuando otro general apareció en escena y le hizo un golpe de Estado: Roberto Marcelo Levingston (1970-1971), quien tuvo buenas intenciones como la de aplicar el desarrollismo nacionalista y llamar a elecciones, sin embargo sufrió las consecuencias de intrigas palaciegas del ala “dura” del ejército y debió cederle paso a un gentleman y digno representante de la oligarquía argentina, el general Alejandro Agustín Lanusse (1971-1973). Continuando con las hazañas de nuestros generales, Lanusse fue responsable la persecución y desaparición de activistas de izquierda, entre ellos los de la Masacre de Trelew, es decir del fusilamiento, sin juicio previo, de diecinueve militantes terroristas luego de intentar el copamiento de la prisión de Rawson. Ante el creciente malestar de la población y el recrudecimiento de la violencia terrorista, Lanusse se vio obligado a convocar elecciones generales y para ello debió levantar la proscripción que pesaba contra el peronismo. Entre los fusiladores Lonardi y Lanusse, habían transcurrido dieciocho años y miles de muertes. Vayan descontándolos, amigos terraplanistas, de los setenta años que le atribuyen al peronismo. Pero todavía no cierren las cuentas, porque en el futuro vendrán generales más sangrientos aún, pero de ellos y de lo que ocurrió entre 1973 y la actualidad, les hablaré el próximo domingo. 

      Abrazo para todos.  

 

 
Gobierno Entre Ríos - VACUNATE A TIEMPO MEJOR PREVENIR QUE CURAR

Gracias por tu interés en breve te estaremos llamando!

¿Estás interesado en anunciar en MaximaOnline?

Déjanos tus datos y un responsable del área comercial te estará contactando a la brevedad!
Completa tu Nombre!
Completa tu Numero de telefono!
Completa tu Email!

Estamos en Facebook danos un me gusta!