La fiesta de egresados que esperan con ansias los estudiantes se transformó en una pesadilla ante la falta de respuestas de la persona a quien le entregaron 85 mil pesos.
Darío Lucero, en representación de padres y alumnos de la Escuela 20 de Junio de Pueblo General Belgrano, contó en RADIO MÁXIMA que “los chicos han perdido muchas cosas por la pandemia y este año esperaban con ansias la llegada de la fiesta de egresados”.
El hombre relató que ante los costos y la situación difícil de muchas familias, los estudiantes decidieron publicar en las redes sociales la búsqueda de un lugar y servicio accesible para hacer una fiesta.
“Allí es donde los contacta este señor (Silvano), que los aborda diciéndoles que el con su familia se encargaban de todo lo que era catering, que el hijo es DJ, que sus hijas eran las mozas, su señora en la cocina y decoración, nos manda fotos de un salón que hicieron y la verdad que por 1800 pesos que pagábamos cada uno decidimos cerrar señando con 4 mil pesos que tenían los chicos de una rifa y en la semana se le termina de entregar lo que él nos pedía que eran 47 tarjetas pagas. Esta semana teníamos que volver a pagar, así que si no nos dábamos cuenta antes nos hubiera sacado mucho mas de 85 mil pesos”, dijo.
Lucero contó que “se contrató un servicio de catering por medio de este señor en calle Ayacucho y Guemes, nos hizo señar para reservar salón, música, servicio de catering decoración. Padres y alumnos entregaron 85 mil pesos y nunca tuvimos más respuestas, nos había enviado fotos y todo, después nos dijo que era en el Club Hipódromo, después en el Club Gervasio Méndez que ahí no daban las condiciones porque nosotros habíamos dejado en claro que en el grupo había un chico en silla de ruedas y queríamos para él las mismas condiciones que para el resto, es decir un lugar donde pueda moverse junto a sus compañeros. Después nos ofrece el Club Dock Sud, que tampoco estaban dadas las condiciones y nos termina ofreciendo el Club Sud América, nos cambia la fecha, nos dice que ya lo había señado, que estaba todo arreglado, entonces nosotros llamamos ahí y nos dicen que todavía no tiene habilitación municipal, que no sabía si iba a poder entrar 220 personas, que es lo que nosotros habíamos reservado, así que optamos por pedirle la plata, nos citó y cuando llegamos a su domicilio nos mandó la policía diciendo que nosotros lo queríamos linchar, que lo estábamos apretando y de los 85 mil pesos nos dio 25 mil y andamos a las corridas buscando nuevo lugar y viendo que hacemos para juntar dinero de nuevo”, relató.
Por último el hombre aclara que “hicimos denuncia en la justicia, el fiscal Pascual está al tanto, sabemos que el proceso va a ser largo. Pero los chicos trabajaron tanto, hicieron rifas, ventas al salir de la escuela, no pudieron ni siquiera hacer un viaje y nosotros queremos hacerle la fiesta. Iba a ser el 18 de diciembre. Hay gente que trabaja de changas y junto peso por peso para alquilar un traje que también ya tiene señado entonces tampoco se puede cambiar la fecha ahora por eso nos cuenta tanto salir ahora a buscar un lugar y tener dinero para señarlo”.
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