Mientras falla una caldera en la pastera de Fray Bentos, confirman la ampliación de Kemira

Mientras el ministro de Ambiente del Uruguay, Adrián Peña aseguraba que ese país ha informado a la Comisión Administradora del Río Uruguay (CARU) que la actual planta química de Kemira instalada en Fray Bentos, será la encargada de suministrar los insumos  para la segunda planta de celulosa que UPM está construyendo a orillas del río Negro, se produjo una nueva falla en la planta de celulosa que funciona en la localidad fronteriza, lo que originó fuertes emanaciones nauseabundas.

Poco después de haber participado de la X Conferencia Iberoamericana de Ministras y Ministros de Medio Ambiente celebrada virtualmente el 16 de septiembre pasado, el ministro Adrián Peña dijo que los efluentes que actualmente la planta Orión de UPM vierte al río Uruguay "están dentro de los límites permitidos actualmente".

El 5 de diciembre de 2019, mediante su Resolución 28, la CARU aprobó la modificación del Digesto para el Uso y Aprovechamiento del Río Uruguay y estableció que el Tema “Calidad de Aguas y Prevención de la Contaminación”, pase a formar parte del Libro IV del reglamento, estableciendo nuevos parámetros mínimos exigidos que permiten una permisividad mayor a la pastera para el vertido de sus efluentes contaminantes al río Uruguay.

Sin embargo, el 15 de enero de este año, con la firma del entonces titular de la Delegación Argentina ante la CARU, el macrista Mauro Vazón, se publicó en la Sección “Avisos Oficiales” del Boletín Oficial que el organismo binacional había aprobado la mencionada Resolución, pero no se incluyeron los anexos con las modificaciones al nuevo texto del Digesto, lo cual hace que no tenga validez legal. Hasta el momento no consta que Uruguay haya publicado la nueva normativa en su Diario Oficial. (1)

Otra irregularidad manifiesta fácilmente constatable es la referida a los resultados de los “monitoreos” que se llevan a cabo mensualmente en la pastera de Fray Bentos. El último informe que se conoce sobre las verificaciones que realiza allí el Comité Científico de la CARU, corresponde a octubre de 2018. Desde entonces han dejado de publicarse en el sitio oficial de la CARU. (2) No se explica muy bien entonces como es que el ministro Peña dice que la planta de Fray Bentos no está contaminando.

En el caso de la fábrica de insumos químicos necesarios para la fabricación de pasta de celulosa, Peña, que hace un mes que encabeza el flamante ministerio de Ambiente creado tras la sanción de la denominada Ley de Urgente Consideración (LUC)- aseguró que  dado que está “corriendo el plazo establecido por el Estatuto de Río Uruguay”, se envió a las autoridades de la CARU la información para su análisis y evaluación. Está claro que el ministro Peña se refirió a la entrega de la documentación referida a la ampliación de la fábrica de Kemira, situada en la misma Zona Franca donde opera la pastera de la ex Botnia.  Es un hecho que, a los efectos de poder suministrar insumos químicos a dos plantas de celulosa –la de Fray Bentos y la Pueblo Centenario en construcción-, Kemira no solo deberá incrementar su producción sino también su infraestructura.

Sin embargo, el titular del Ministerio de Ambiente uruguayo no hizo mención alguna a lo atinente al proyecto integral de la planta de celulosa UPM 2 que los finlandeses ya están construyendo a orillas del río Negro. En virtud del Estatuto de Río Uruguay, las autoridades del vecino país también están obligadas a entregar a la CARU dicha documentación para que sea analizada.

• Emanaciones a raíz de falla técnica

En tanto, desde las primeras horas de este sábado comenzaron a percibirse fuertes emanaciones y olores fétidos en varias zonas de Fray Bentos. Una vez más, la causa de este nuevo episodio se centra en la planta de celulosa de UPM en esa ciudad. Todo se originó en una falla en una de las calderas de recuperación, algo que la corporación finlandesa confirmó y que calificó como “una perturbación”.

Asimismo, la empresa nórdica aseguró que los olores nauseabundos que, durante la jornada de este sábado afectaron a Fray Bentos, “en ningún caso afectan la salud de las personas”, pero como suele ser habitual por parte de UPM, no brinda ninguna explicación fundamentada que sostenga semejante aseveración.

En un escueto comunicado, Botnia precisó que “el sábado 26 de setiembre sobre las 6.30 horas ocurrió una perturbación en la caldera de recuperación asociada al sistema de transmisión eléctrica de UTE.  A raíz de esta situación se generaron episodios de olor en las cercanías de la planta, que, en ningún caso afectan la salud de las personas. Se informa además, que los trabajos de reinicio a las operaciones normales ya comenzaron. UPM continuará informando oportunamente al respecto en la medida en que avanzan la reanudación normal de tareas”. (3)

En tal sentido es oportuno desmontar de una vez por todas lo que sistematicamente afirma la empresa contaminante finlandesa en cada ocasión que se produce un incidente en la planta de Fray Bentos. Lo que Botnia define como "episodios de olor" en realidad se trata de emisiones gaseosas tóxicas y utilizan picarescamente el término"olores" aprovechando que esos "episodios" no son competencia de la CARU. 

Sin embargo, las emisiones gaseosas tóxicas están expresamente identificadas en el Acuerdo por Canje de Notas Reversales suscripto por las Cancillerías de Uruguay y Argentina del 30 de agosto de 2010, que se concretó poco después del fallo del Tribunal Internacional de Justicia de La Haya. Este instrumento diplomático sigue vigente y en base a ello, las autoridades argentinas deberían exigir explicaciones al vecino país. No lo han hecho en los últimos años, a pesar que han sucedido innumerables incidentes en la Zona Franca fraybentina.

Ante el estrago permanente que perpetra la planta de celulosa nórdica ubicada en Fray Bentos y que aumentará en pocos años, cuando comience a producir la nueva pastera a orillas del río Negro porque sus residuos contaminantes también llegarán al río Uruguay, ha llegado el momento que se modifique urgentemente la manifiesta inmovilidad que ha demostrado la Argentina y se actúe sin más dilaciones.

Permanentemente escuchamos a algunos encumbrados funcionarios y dirigentes llenarse la boca hablando del Cambio Climático y de la necesidad de preservar el ambiente. Mientras tanto, el daño por la contaminación en el río Uruguay continúa y, se agravará aún más en un futuro cercano, a manos de una corporación anacional amparada por los sucesivos gobiernos uruguayos de los últimos años a la fecha.

Lo que en su momento se enarboló como "una causa nacional", hoy es una bandera olvidada. Mal que le pese a quien le pese, no es cierto que este conflicto esté superado, como muchos pretenden que creamos. Todo lo contrario.

NOTAS

(1) Boletín Oficial Nro.34.285, Sección Avisos Oficiales. Buenos Aires, 15 de enero de 2020

https://www.boletinoficial.gob.ar/detalleAviso/primera/224578/20200115

(2) Comisión Administradora del Río Uruguay. http://www.caru.org.uy/web/actividades/planes-de-monitoreo/

(3) http://www.inforio.com.uy/noticia.php?id=13339