Padres de un niño discapacitado piden una vivienda en condiciones dignas

Axel tiene 7 años y sufre parálisis cerebral desde nacimiento debido a complicaciones en el parto. Permanece en una silla postural y no tiene mucho espacio para moverse.

Gisela Saavedra, la mamá, cuenta que también tiene su andador y bipedestador, pero dentro de la casa no hay espacio y los pisos tampoco son seguros para que el niño pueda moverse. Juan, papá de Axel, agrega que la casa en la que viven desde unos ocho años es prestada y está en sucesión, por lo que no pueden hacerle arreglos, además de la imposibilidad económica, ya que se trata de una vivienda muy antigua y con muchos problemas por el paso del tiempo.

“A veces le ponemos un colchón acá en la cocina para que esté más calentito porque las ventanas solo tienen maderas y no hay cielorraso, las chapas gotean para adentro y hace más frío que afuera. Tenemos dos hijos más chicos también y se enferman”, relataron.

La humedad se nota en las paredes y la precariedad en toda la casa. Gisela dijo a RADIO MÁXIMA que está anotada desde hace 18 años en el registro del IAPV y 4 años en el registro de viviendas municipal, pero que no ha tenido respuestas para conseguir una casa donde Axel pueda vivir mejor. “Si no tengo trabajo en blanco con recibo me dicen que no puedo”, cuenta Juan,  quien siempre hace changas de todo tipo desde que se quedó sin trabajo hace unos dos años.

“No queremos que nos regalen ni den. Yo siempre trabajo. Ahora estoy en una obra y cuando se termine seguro conseguiré otra cosa. Vivimos el día a día, podemos pagar una cuota y queremos vivir en mejores condiciones, sobre todo para él”, dice con su hijo en brazos, “que pueda moverse dentro de su casa y no estar sobre un colchón”.