En una escuela sin aulas suficientes dictan clase bajo los árboles

En diálogo con RADIO MÁXIMA, Estela Lemes, directora del establecimiento rural y conocida por su historia de lucha contra la fumigación, contó que “hasta 2014 teníamos una matrícula muy pequeña, unos 14 alumnos se transformaron en ese año en el mes de noviembre, en más de 70, por el traslado de una parte del asentamiento norte al nuevo barrio Toto Irigoyen. En 2015 pasamos a 120 alumnos y los espacios que había los fuimos transformando como pudimos. Por ejemplo primer grado funciona en lo que era la cocina del director, pero segundo grado tiene que dar en el patio porque no hay más lugar. Ahora momentáneamente el área Viviendas municipal está haciendo una división de salón para 5to y 6to pero nos falta el nombramiento de un cargo y una sola maestra para los dos grados no puede trabajar con 29 chicos juntos en el mismo salón con dos temas diferentes”, relata Estela.

Otra de las necesidades urgentes que tiene la escuela es la construcción de baños. “Los niños de jardín están compartiendo el baño con los más grandes, con  todo lo que esto implica. Necesitaríamos al menos dos aulas y dos baños y un cargo docente y que por favor Vialidad Zonal que tiene la jurisdicción acá nos haga limpieza de pastizales alrededor. Nosotros no tenemos los medios para desmontar, sino lo haríamos, hay muchas yararás por la sequía que salen de esos montes y se vienen a la escuela”.

Por último, Lemes dejó en claro que “la realidad es que se necesita un edificio nuevo, la zona creció y la solicitud de bancos también”.