Ayer por la tarde, en el Estadio Municipal, los de Villa Paranacito golearon 3 a 0 a Defensores del Oeste y se quedaron con el título anual de la Divisional B. Los dos terminaron con diez por las expulsiones de Brian Frías y Lucas Crisnejo.
Los dos equipos ya se habían asegurado el objetivo máximo, que era el ascenso a la A, sólo restaba definir el campeón de la temporada, y el título fue para el “Rojinegro” que marcó la diferencia en el segundo tiempo para llevarse un triunfo inobjetable.
Tras un primer tiempo de trámite parejo, cerrado y con pocas situaciones de gol, Isleños fue amplio dominador en la segunda mitad y terminó goleando al “Celeste”,
A los 23’ del complemento Brian Cabrera ganó en las alturas -pese a ser un jugador de baja estatura- y de cabeza abrió el marcador, tras un tiro de esquina de Brian Frías.
Cinco minutos después, y por la misma vía, Dylan Sánchez conectó de derecha el córner desde la izquierda y puso el 2-0, que comenzaba a sentenciar la historia a favor de los “Rojinegros”.
Sobre los 30’, el juez Hernán Collaso expulsó a Lucas Crisnejo en Defensores y a Frías en Isleños por una supuesta agresión entre ambos, de la cual el capitán de Isleños pareció no participar de ese tumulto.
Y a los 40’, el goleador “Maxi” Lovaiza puso cifras definitivas tras pescar un rebote del arquero Nicolás Migueles y con un derechazo colocar el 3-0.
Contundente victoria de los de Villa Paranacito, que fueron justos ganadores y sumaron una nueva estrella a su historia.
Foto: Ricardo Santellan
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