Por la 37° fecha, el Decano cayó como local ante Los Andes por 1-0 y dejó pasar una gran oportunidad de escaparle a la zona baja de los promedios. Más allá del resultado, el Albiceleste jugó un flojo partido, no tuvo claridad en ofensiva, cometió errores que le costaron la derrota y nunca logró dar respuestas para revertir la desventaja.
Juventud Unida había salido airoso de la fecha pasada en la que había quedado libre porque los rivales directos en la lucha por mantener la categoría no obtuvieron resultados positivos y el Decano permaneció fuera de la zona de descenso y sin la posibilidad que lo alcancen en esta jornada. Pero también necesitaba hacer su trabajo, el de ganar como local y encima ante un rival de irregular torneo como lo es el conjunto de Lomas de Zamora, poder escaparle a la zona baja de los promedios, escalar posiciones en esa tabla y tomar respiro.
Finalmente Juventud jugó otro partido olvidable y volvió a perder como local. Fue 1 a 0, en un partido donde el Albiceleste se mostró impreciso con la pelota, no tuvo peso en ataque y falló en los metros finales, donde hace tiempo le cuesta una enormidad generar situaciones de goles. Además cometió errores de concentración que le costaron la derrota.
El único gol de la noche lo convirtió Rodrigo Bogado con un zurdazo cruzado al segundo palo tras una asistencia de Marcos Britez Ojeda, que comandó una contra luego de anticiparlo a Ramírez en mitad de cancha y robarle la pelota
El Decano lo fue a buscar con fuerza que con fútbol y solo pudo llevar peligro al arco de Federico Díaz en la última del partido con un remate de media distancia de Capella que se estrelló en el palo y terminó el partido. Juventud volvió a resignar puntos de local, se complica en los promedios y no da respuestas para revertir este momento adverso.
Foto: Ricardo Santellan (El Argentino)
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