Cayó 92-73 y ahora deberá esperar que no gane Croacia contra los lituanos, para evitar un cruce contra EE.UU.
El desgaste del partido ante Brasil, el poderío del juego de los campeones mundiales de 2006, la falta de peso bajo los tableros y la necesidad de cuidar el físico cuando el partido estaba definido sentenciaron la derrota argentina por 92-73, por lo que la Selección ahora deberá esperar hasta las 0.30, cuando termine Lituania-Croacia, para saber si queda tercero o cuarto del grupo. En caso de que ganen los lituanos, Argentina será tercero y se medirá mañana contra Australia en los cuartos de final. Si vencen los croatas, será cuarto y el rival será Estados Unidos. El que todos querían evitar.
Duró lo que una gota en disolverse en un vaso el buen comienzo argentino, con un 8-0 gracias a la efectividad Manu en triples y un doble de Laprovíttola. Del otro lado, Rudy Fernández y Mirotic tomaron la bandera de la recuperación e igualaron 8-8. Y después del 11-8 nacional, con otro triple de Ginóbili, se vino el vendaval español, con un parcial de 14-0 hasta el 22-11.
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